En el taller de José

“ ¡Que solo Jesús se luzca!” (S. Josemaría). Así quiso el Padre Eduardo Torres, rector del Seminario San José, expresar de su ministerio la centralidad de nuestro Señor en la celebración de sus Bodas de Plata sacerdotales. La celebración de la Eucaristía en la Parroquia Santa Ana de su pueblo natal, Cervera del Rio Alhama, fue  concelebrada por varios sacerdotes: compañeros de estudio en el seminario, amigos y ex-alumnos de Puerto Rico. Terminada la Santa Misa, compartimos la comida en el salón parroquial. A continuación una breve reseña.

El Seminario de San José de la Diócesis de Arecibo (Puerto Rico), durante una visita realizada el 8 de diciembre de 2012 al santuario, y en la que el rector, P. Eduardo Torres presidió la celebración eucarística junto a los seminaristas, y el pueblo allí reunido.  

El Seminario San José celebró su Día de Acción de Gracias como es tradicional en Puerto Rico. Para esta ocasión algunos compañeros seminaristas prepararon la cena y otros organizamos el comedor para poder celebrar el agradecimiento a Dios por los alimentos y todos los beneficios que nos dispensa día a día. Sentados en torno a la mesa compartimos como familia los motivos personales por los que cada uno quería dar gracias, y a la vez elevar juntos una oración por todos aquellos que carecen del pan material y espiritual.

Esta grata tarde comenzó con el rezo de las vísperas presididas por el Arzobispo. Luego compartimos la cena y una tertulia muy amigable.  El relato de estas primeras semanas en Navarra, la universidad y la convivencia en el seminario amenizaron la conversación, que no careció del matiz divertido que supone hablar de los primeros pasos de todo proyecto.  No podía faltar la interpretación de varios cantos de nuestra Isla del Encanto, Puerto Rico, y la presentación de algunas fotos significativas.

Homilía de Mons. Daniel Fernández Torres, Obispo de Arecibo El sacerdote: “esposo de la Iglesia y custodio de la Eucaristía” Vivimos hoy un acontecimiento histórico. Un acontecimiento que no solo pasa a ser parte de la historia, entendida como una sucesión de hechos ocurridos en el tiempo, sino de una historia que es también, y ante todo, historia de salvación.  La historia sagrada sabemos que está hecha de múltiples intervenciones de Dios, que es quien tiene la iniciativa, que al ser acogidas en la fe por el hombre se convierten en auténticos acontecimientos salvíficos.

CAPÍTULO I: NATURALEZA. 1.- La Diócesis de Arecibo erige en la ciudad española de Pamplona un Seminario mayor para la formación de sus futuros sacerdotes bajo la advocación de San José , con la aprobación del arzobispo de Pamplona y el visto bueno de la Congregación de educación católica. Este Seminario, por el hecho de su legítima erección, tiene personalidad jurídica en la Iglesia (cf CIC 238, &1) y se regirá por el derecho común de la Iglesia latina (cf CIC 232-264), por la Ratio institutionis sacerdotalis puertorriqueña, y por estos Estatutos. En el campo correspondiente queda expresamente sometido a la legislación administrativa, penal y civil española. 2.- Corresponde al obispo de Arecibo el gobierno superior del Seminario, siendo competencia suya aprobar los Estatutos del Seminario, interpretarlos auténticamente y modificarlos, si lo juzga conveniente, quedando siempre a salvo los derechos de la diócesis del lugar y de la Santa Sede. 3.- Este Seminario se instal